En todo el mundo existe una infinidad de productos que portan nombres afortunados, pero lamentablemente las más de las veces las marcas no reflejan bien los productos que representan. En esta ocasión ilustraré con algunos ejemplos la correcta elección de un nombre comercial, así como algunas elecciones erróneas, procurando en todos los casos aportar un poco de información.

AUDI – Aunque parezca curioso, esta marca acuñada a principios del siglo 20 por el fabricante alemán de automóviles deriva de la palabra “oír”. ¿Comprendes la relación entre ese verbo y un coche? La verdad yo no, pero la elección derivó del apellido del fundador, Horch, que significa “oír”. Lo tradujo al latín. ¿Comprendes? Yo no.

BEATLES, THE – Fonéticamente la palabra suena igual que “beetles” o “escarabajos” en español, que como tal no tiene ninguna implicación semántica interesante para un grupo de músicos. Sin embargo el nombre trastocado incorpora un ingrediente creativo: “beat” o “ritmo”. Es gracioso cómo la partícula “les” se separa al entender “beat”. ¿Sin ritmo?

COVERGIRL – Fantástica marca para una línea de maquillajes… para quien entiende lo que significa en inglés: “la chica de la portada”. Sí, la intención es hacer referencia a las modelos de revistas, generalmente preciosas. Claro, si no comprendes la idea podrías malinterpretar: ¿un maquillaje que cubre a una girl? Ups!

DOVE – Oh, sí, “Paloma” es un nombre perfecto para hacer referencia a un jabón suave, blanco, de formas redondeadas, ¡y para referir a las mujeres! Al igual que en el caso de Covergirl, Dove solo es una marca clara para quien habla inglés. Estamos frente a un par de casos en que los nombres elegidos tienen ciertos límites debidos al idioma.

EPSON – ¿Quién pensaría que esta marca es japonesa? Bueno, algunos empresarios tienen una visión de largo alcance, pero eligen marcas que no pueden ser comprendidas ni en sus países. “Hijo de EP” es lo que significa este nombre en inglés: las impresoras así bautizadas son hijas de la primera electronic printer de la compañía, la EP-101, ¡claro!

FISHER PRICE – De una compañía americana, esta marca fue acuñada con los apellidos de los accionistas principales para representar toda una línea de juguetes infantiles. Claro, si fuera el nombre de una cadena de pescaderías estilo Nueva York —”El Precio del Pescador”— sería una marca fantástica. Pero no. Aquí entró en operación el ego de los dueños.

GILLETTE – Una marca muy exitosa que también es el apellido del fundador. ¿Significa algo favorecedor de los productos que representa? No. Pero como otras marcas mundiales, tantos años en el mercado y la inimaginable inversión en publicidad la han fortalecido hasta significar lo que hoy significa para millones de hombres en el mundo.

HSBC – Solo las grandes compañías dispuestas a invertir millones en publicidad pueden utilizar sus siglas para identificarse, ¡y cuidado! No a todos les funciona —¿verdad KFC?— La corporación bancaria británica es sumamente famosa, pero muy pocos saben que sus cuatro letras significan Honkong and Shangai Banking Corporation. Wow!

En un futuro episodio de esta serie volveré a revisar más marcas, sus aciertos y sus fallas, de manera que quienes deseen lanzar un negocio sepan cuáles son los tips and tricks para elegir correctamente su nombre, uno que no requiera millones en publicidad ni mil años en el mercado para hacerse entender.